Ana Claudia Talancón habla de American Curious

Lo primero que atrajo la atención de Ana Claudia Talancón sobre el personaje de Sol, que interpreta en la película American Curious, fue “la posibilidad de mostrar un lado de México que me encanta: el lado gastronómico”. Eso se combinó con la historia que es el motor de la ópera prima de Gabylu Lara: la de David (Jordan Belfi), “un personaje que está tratando de conectar con sus raíces y su origen y que rompe la barrera del idioma y la nacionalidad. Mi papá es chef, a mí me encanta cocinar, me encanta comer y me gustó mucho que mi personaje tuviera que ver con estas cosas”.

David es estadounidense y se acaba de enterar que su origen es mexicano. Cuando fallece su madre biológica, es contactado por un abogado que le informa que ella lo ha nombrado su albacea. Así que viaja a México para recibir la herencia: un restaurante de éxito notable y una casa. Y aunque decide venderlo todo, eso no evita que busque sus raíces. En esto lo ayuda Sol, la chef del restaurante.

Su investigación los lleva a buscar pistas en el mercado de La Merced. “No conocía La Merced –dice Ana–, pero tenía una gatita, se acaba de morir hace poquito, duró ocho años, que era de La Merced y vi qué tanto le cambié la vida. Hay tanta gente, tantas cosas pasando al mismo tiempo. De repente ves las cabezas de puercos, la parte de la comida, las gorditas de chicharrón, frutas, verduras, animales vivos, animales muertos. Me gustó muchísimo. Y no es lo mismo ir como Ana Claudia, a veces la gente dice no creo que sea, pero ir trabajando es una experiencia totalmente distinta. Teníamos al asistente de dirección diciendo por el altavoz: ayúdenos a hacer buen cine mexicano, no voltee a la cámara. Y nos ayudaban. Traíamos extras, pero además había extras naturales y sí nos ayudaban”. 

También filmaron en el metro de la Ciudad de México. “Tenía muchas ganas de filmar ahí. En general me gusta mucho filmar en locaciones, más que en sets donde está todo cerrado. A los directores de fotografía les gustan más los sets, pero son más divertidas las locaciones. Además, no los cerraron. Todo el tiempo estaba pasando la vida cotidiana y poder echarte un clavado a esto, está increíble. Yo no crecí en la Ciudad de México, sí he vivido aquí mucho tiempo, pero poder reenamorarme de esta ciudad, y poder reencontrarla, redescubrirla a través de sitios a los que nunca ni siquiera había ido, fue muy padre”.

Ana Claudia sostiene que le gusta la actuación porque puede echar a volar la imaginación, y eso le encanta. “Creo que tenemos un trabajo privilegiado a través del cual podemos divertirnos y con el cual podemos vivir. Pero sobre todo conocer a tanta gente interesante, poder compartir; a mí me encanta trabajar en equipo, es de las cosas que más me gusta porque también me gusta la escultura, la pintura, pero este sentido de pertenencia cuando estás trabajando en un equipo me fascina. Teatro, cine y televisión te dejan vivirlo, algunos con la agitación más fuerte que otros,  pero te da un sentido de pertenencia muy padre. Y también con la responsabilidad social, el saber que adquieres una voz que puede poner un ejemplo para otras personas es un sentido de responsabilidad social. Me gusta mucho poder poner un ejemplo de conciencia social”.