Ariadne Díaz debuta en cine en Te Juro Que Yo No Fui
Cuando Ariadne Díaz había decidido hacer una pausa de la televisión para hacer teatro, actuando en La dalia negra, el director Joaquín Bissner la invitó a ser parte del elenco de la película Te juro que yo no fui, que incluye en el reparto a Mauricio Ochmann, la española Marta Hazas y a María Aura, entre otros. “Leí el proyecto y la verdad es que me gustó hacer algo que no había hecho”. Era la primera vez que trabajaba en un proyecto cinematográfico.
“El cine tiene estas dos partes: el momento en el que estás trabajando y el momento en el que finalmente se estrena. Fue muy interesante porque decidí tomarme una pausa de la televisión para hacer teatro y entonces me invitaron y muy padre estar trabajando casi al mismo tiempo en estos tres aspectos. Fue muy interesante descubrir todo lo que plantea hacer una película. Y hoy estoy muy contenta porque una vez más he decidido darme una pausa, ahora para mi vida personal, y finalmente se estrena esta película”.
Ariadne interpreta a Mónica, la esposa de Ludwig (Ochmann), “una mujer un tanto psicótica, celosa, muy impulsiva, nada prudente, en un tono muy alto. Es un personaje muy divertido, nada parecido a lo que había hecho antes y nada parecido a mí en la realidad. Es una mujer que no tiene tapujos para armar una escena de celos ni en hablar de una manera estridente, que empieza a convertirse en una stocker, a seguir al personaje de Mauricio por todas partes, porque siente y cree, y en este caso tiene razón, que él la está traicionando. Tiene una personalidad muy simpática pero al mismo tiempo un poco locochona”.
Para Ariadne, de alguna manera todos los personajes se parecen a quien los interpreta. “No es que este personaje se parezca a mí, pero al momento en que lo estoy interpretando yo, cedo algunas de mis características y las llevo al máximo para poder llegar a él. Yo no soy celosa, soy bastante penosa cuando veo este tipo de escenas de las mujeres celosas, me da un poco de pena ajena, pero entonces piensas: yo no soy así, pero si lo fuera y me lo permitiera, ¿cómo lo haría? El personaje y mis características llevadas al extremo logran que sea así Mónica”.
Como era su primera experiencia en cine, Ariadne buscó apoyarse del director. “La verdad es que yo, con toda la humildad del mundo, le dije hoy empezamos, tengo muy estudiadas mis escenas y muy leída la historia y todo, sin embargo es la primera vez que hago cine y estoy muy abierta a cualquier tipo de indicación. Llevo muchos años de hacer esto, pero en otro plano, que es la televisión. Hay muchas cosas que siendo actriz podrías intuir o tener esta experiencia de esta manera, pero llegas a cine y te das cuenta que el ritmo es muchísimo más lento que en tele, que las cámaras siempre tienen que emplazarse y volver a repetir la escena. Joaquín siempre fue muy amable, muy lindo para decirme las cosas que era importante que supiera, pero al mismo tiempo me dejó ser muy libre. Yo le agregué muchos gestos, muchas palabras, muchas frases al personaje y él me lo permitió. Entonces me sentí muy a gusto, aprendiendo mucho del proceso y sintiéndome muy libre”.
Aquí puedes ver el tráiler de Te juro que yo no fui:
Ariadne, actriz referente de la telenovela contemporánea, dice que en cine son cada vez más importantes los personajes femeninos. “Estamos en una época donde sin duda las protagonistas son mujeres. Creo que en televisión había sido siempre así, pero en el cine era donde tenían menos fuerza estos roles femeninos. Sin embargo, cada vez más hemos ganado terreno, y creo que esto se debe a todos estos movimientos que ha generado la gente, las actrices, desde Hollywood hasta acá. Entonces sumándonos se está abriendo una puerta muy importante para nosotras en todos los aspectos, no solamente en el cine, no solamente como actrices”.
La actriz vallartense, que a los 18 años cambió la intención de estudiar medicina, motivo por el cual se mudó a Guadalajara, por la actuación, por lo que acabó viviendo en Ciudad de México, dice que no se imagina “cómo sería vivir una sola vida, pues toda mi vida me he dedicado a esto. Me parece un poco abrumador, creo que me aburriría mucho. El hecho de que una parte de ti por un momento pueda creer en una realidad completamente opuesta a la que estás viviendo o lo que has vivido, me parece muy divertido, muy atractivo”.
Para ella, aunque son muchas las herramientas con las que cuentan, las vivencias de un actor son las que lo hacen. “Es la parte más importante: siempre que ves un buen actor, al menos a mí como espectadora, pienso: esa persona ha vivido cosas fuertes. No quiere decir traumáticas ni mucho menos, simplemente ha vivido cosas. De repente, a mí me pasa, ves actuaciones muy planitas y eso te habla de la frivolidad del actor, de no querer llegar más a fondo. Incluso en un tipo de historia como esta (Te juro que yo no fui). Estamos en un momento en que para pasarla mal hay que poner las noticias y ya. La gente quiere un poco más de ligereza: reírse y disfrutar. Es un poco eso: la necesidad de escapar de la realidad y de las malas noticias, el hecho de que mucha gente escoja este tipo de proyectos para verlos”.