Déjame estar contigo, una película de amor juvenil

El estreno de Déjame Estar Contigo marca un hito en el cine mexicano contemporáneo. Bajo la dirección de Isaac Cherem y con un guion profundamente personal de Fernanda Eguiarte, esta película se adentra en los temas universales del duelo, la pérdida y las oportunidades inesperadas que pueden surgir del dolor. Protagonizada por Andrea Sutton (Lucía) y Aksel Gómez (Bruno), la historia nos lleva a explorar las conexiones humanas en la Ciudad de México, un escenario que se convierte en un personaje más.

Una “Vida B” Narrada desde el Corazón

“Cuando me diagnosticaron esclerosis múltiple, entendí que mi ‘Vida A’ había terminado”, comparte Fernanda Eguiarte, guionista de la película. “Esta película es parte de esa reinvención, un intento de darle sentido al duelo y a las nuevas oportunidades”. Déjame Estar Contigo es el reflejo de este renacimiento emocional, un relato que combina humor, drama y romance en una narrativa profundamente conmovedora.

Química en pantalla

La elección del reparto fue clave para dar vida a Lucía y Bruno. Mariana Rodríguez, productora, destaca: “Con Andrea Sutton buscamos una actriz que reflejara la coexistencia con una enfermedad crónica, con humor ácido y sarcasmo nato. Con Bruno, sabíamos que necesitábamos autenticidad, y Aksel Gómez fue perfecto”. La química entre ambos actores fue inmediata. Andrea recuerda: “Desde el primer momento, sentí una conexión enorme con Aksel. Nuestro proceso estuvo lleno de confianza y risas”. Por su parte, Aksel comparte: “Actuar junto con Andrea fue un placer; confiamos el uno en el otro desde el principio”.

La Ciudad de México como personaje

La película no solo se desarrolla en la Ciudad de México, sino que la capital se convierte en un elemento narrativo esencial. Fernanda Eguiarte explica: “Queríamos retratar una CDMX viva, que se pueda oler, sentir y tocar. Exploramos el sur de la ciudad, alejándonos de zonas populares como la Roma y la Condesa, destacando lugares como el Espacio Escultórico de Ciudad Universitaria”.

Una banda sonora que conecta generaciones

El productor José Nacif subraya la importancia de la música en la película: “A través de No se va de Morat, nuestros protagonistas conectan con la audiencia. La banda sonora no solo cuenta una historia de amor juvenil, sino también un tributo a la Ciudad de México”.

Una Producción llena de amor

El ambiente en el set fue crucial para capturar la esencia de la película. Mariana Rodríguez lo describe como “ligero, fresco y lleno de amor”. Este espíritu se imprimió en la pantalla, fortaleciendo el mensaje central de la película.

Un mensaje para la audiencia

Déjame Estar Contigo no es solo una película, es una invitación a reflexionar sobre la vida, el amor y las segundas oportunidades. Andrea Sutton lo resume: “Este proyecto es un regalo. Interpretar a Lucía me ayudó a crecer como actriz y como persona”. Aksel Gómez añade: “Sentí que este proyecto llegó como un regalo en mi cumpleaños, una oportunidad para aprender y compartir una historia tan especial”.

No te pierdas este emotivo estreno que promete tocar corazones y mostrar que, incluso en los momentos más difíciles, la vida puede sorprendernos con nuevas posibilidades. Déjame Estar Contigo llega en enero a los cines de México.

Ve aquí el tráiler: