Natalia Téllez debuta en cine
Hasta hace poco, Natalia Téllez era conductora del programa Hoy. Como actriz, hizo su debut en cine con En las buenas y en las malas, comedia romántica en la que interpreta a Carolina, la wedding planner no solicitada de Valeria (Zuria Vega). “Es una chava muy frustrada de que las cosas en su vida no pasaron como ella quería, en una estructura muy conservadora de vida. A lo que aspiraba era a casarse, pero no pudo hacerlo y no por una decisión personal. Y a partir de ahí ella organiza bodas, pero siempre a partir de esta frustración y esta ansiedad de que debería ser la suya”.
A Natalia, quien tiene dos millones de seguidores en su cuenta de Instagram, le gusta que Carolina experimente una transformación que, dice, la libera. “También creo que ocurre: que las cosas no son como en tu mente controladora y enferma quieren que sean, sino como tienen que ser y que son perfectas así. Y empieza a fluir con esta idea, con esta amistad con la protagonista y con estas personas increíbles con las que se topa y se convierte en alguien sensible y divertido”.
Para ella la película acierta porque no sigue la fórmula típica. “Se ha contado una fórmula del amor demasiado cuadrada y nos ha hecho demasiado daño porque así de fuerte lo consumimos. A título personal, creo que historias como esta cuentan la vida desde un punto más real, con más aristas, con más huequitos, con más realidades, y en la medida que seamos capaces de contar las historias desde otro ángulo, a lo mejor como sociedad podamos empezar a permitir tener vidas más reales y menos perfectas. No intentar acceder a la perfección, sino a lo que sea real y no sentirnos culpables por eso”.
Para quedarse con el papel, Natalia hizo casting. “Y nunca pensé que me lo iba a quedar, nunca había hecho cine en mi vida. Fue mi primer película. Me enamoré del proyecto desde que me mandaron el guion de la escena del casting”. En ella, Carolina prácticamente obligaba a alguien a contratarla, con cinismo y desfachatez. “Me pareció un humor negro muy sarcástico, me daba risa porque amo a la gente que es intensa. Es un personaje intenso con una línea muy delgada entre que lo ames o lo odies. Está padrísimo. Y creo que soy esa persona: estoy en la línea entre que me ames o me odies, y me pareció lo mismo”.
Para ella es importante “situar a las mujeres en historias, aun si son románticas, que no las encasillen en ciertas decisiones y ciertas líneas, porque de verdad el entretenimiento sí tiene un impacto en lo que las chavas a futuro piensan en cómo debe ser su vida o cómo deben ser sus decisiones. Ya sea que quieras ser mamá o profesionista, tienes que ser honesta y que lo hayas decidido tú. Como chava, creo que ha sido suficiente de que te indiquen que solo hay una línea a seguir”.
Aunque les dieron libertad de improvisación, dice Natalia que eso fue lo más difícil: recordar qué y cómo lo había hecho. Además de En las buenas y en las malas, que estrena el 15 de marzo bajo la dirección de Gabriel Barragán Sentíes, Natalia Téllez filmó Veinteañera, divorciada y fantástica y tiene el proyecto de una película más de la que no pudo dar más detalles.