Purasangre, un thriller mexicano con dosis de acción

Este 13 de enero del 2017 Purasangre detendrá tus latidos

El proyecto de Purasangre surgió hace 6 años. Cuando los socios de la productora Época se reunieron a hacer una lluvia de ideas, a Mauricio Argüelles —actor y productor de la película— se le ocurrió hacer una historia sobre un grupo que quería robar un banco mientras afuera todo mundo estaba encerrado porque había un huracán. En cuanto escuchó eso, Francesco Papini (socio y guionista de la serie El diez) supo que ahí estaba la historia que quería escribir. “Al final solo quedó lo de hombres roban”. Sin embargo, ese fue el catalizador para esta historia sobre cinco hombres que, para quitarse de encima la presión de un mafioso, deciden asaltar el hipódromo. Aunque lo logran, luego todo se complica y hacen el pacto de guardar el dinero en una caja fuerte, cada uno metiendo un número que solo él conoce, y esperar a que el caso prescriba (cinco años después) para volverse a reunir y repartirse el botín.

Y a pesar de que sí es el detonador, ésa no es la parte central de la película. “Desde el primer tratamiento que entregué del guión, a finales de 2010, siempre estuvo pensado que la historia era entre Chema (Argüelles) y Manolo, el policía (Hernán Mendoza), dos personas en un interrogatorio dándote el recuento de los hechos. La película no se trata del robo, sino de lo que pasa después”.

Eso mismo dio la pauta para la estructura no lineal de este thriller, un género prácticamente inexplorado en el cine nacional. “Es una película que sí tiene acción pero que no es necesariamente de acción. Le es fiel al guión en un porcentaje muy alto”. Papini, quien también firma como productor, asegura que la parte más personal de Purasangre está en la relación entre Chema y su hermano mayor, Jaime (Luis Roberto Guzmán). “Yo tengo un hermano mayor y toda la vida hemos sido mejores amigos y él todavía me cuida. Me ve como el inmaduro, el necio, entonces eso de cómo mi hermano me cuida a mí, lo puse en cómo Jaime ve a Chema”.

Es precisamente el tema de la familia —además del de la desconfianza, que se vuelve detonador de la historia—: “nosotros extrapolamos el significado literal de los lazos sanguíneos y lo llevamos a la lealtad que existe en este grupo —explica Papini—, que sí son hermanos de sangre, a lo mejor no de forma directa, pero es ese vínculo que tienen entre ellos cinco que sí los une. Creo que es una de las temáticas principales de la película: cuál es la dinámica entre estos cinco hombres y, por ende, cómo los motiva a actuar de las formas cómo actúan”.